Madame Pomfrey ha hablado.

Caminando sigilosamente hacia le enfermería, libreta en mano, esta reportera golpeo la puerta del despacho de la medimaga Poppy Pomfrey y fui recibida dentro.
Sentada frente a la mujer que vela por nuestra salud, comiendo una de esas paletas que les dan a los niños recién vacunados (cortesía de la enfermera^^), comencé la entrevista.

-Bueno, ¿podría darnos la cantidad actual de alumnos en la enfermería?
- De momento hay ocho. Los cuatro Jefes de Casa y cuatro alumnos más, no tengo los nombres a mano... pero supongo que ya los sabrás, ¿verdad? Hmm... la última en ingresar fue Azucena Arias, con los mismos síntomas que el profesor Flitwick, un sarpullido en el brazo. El Jefe de Casa de Ravenclaw también ha ingresado en la enfermería ayer, además del sarpullido en el brazo, también se ha desmayado.

Asentí, ya todos conocemos al resto de los alumnos que se encuentran enfermitos allí, le di otra chupada a mi paleta con sabor a cereza y proseguí la entrevista.

-de acuerdo, entonces, ¿podría comentarnos lo que se sabe hasta el momento de esta misteriosa enfermedad?
-Prácticamente nada... es decir, lo único que sabemos es que no es contagiosa, y raramente algunos de los enfermos muestran los mismos síntomas. Los médicos de San Mungo nos dijeron que se trataba de una enfermedad desconocida.

Menudo panorama, eso significaba que estábamos tan informados como al principio...

-bien, ¿y qué medidas se están tomando...?
-Como ya sabrá, el colegio se encuentra en cuarentena. No puede entrar ni salir nadie... no podemos arriesgarnos a que aparezcan más casos parecidos.
-¿y los pacientes? ¿como están siendo tratados?
- ¡Oh! Menuda pregunta, jovencita. ¡Pues estupendamente! Me ofende que lo pregunte... Los enfermos están las 24 horas del día atendidos especialmente por mí y tienen todo lo que necesitan, no les falta de nada

Yo me había referido a qué medicinas les estaban dando, pero la acalorada respuesta me había acobardado un poco, temía que me quitara mi paleta...

-ho... bueno, disculpe... -se produjo un momento de silencio incómodo, antes de mi siguiente pregunta:
- ¿qué puede hacer el resto del alumando al respecto?
- No sabría qué decirle... si nuestras artes curativas no han podido hacer mucho y San Mungo lo califica de enfermedad desconocida... tal vez ni si quiera se trate de una enfermedad. La directora no ha descartado la posibilidad de que se trate de una maldición y ha mandado a todos los profesores a investigar a los enfermos, por si acaso encuentran algún indicio de hechizo o maldición. Así que de momento no creo que podamos hacer nada más... solamente investigar. Investigar, ser pacientes y esperar.

A estas alturas la enfermera se había levantado y miraba el reloj con impaciencia, decidí hacer la última pregunta para no molestar mas.

-¿Algo mas que desee agregar?
- Sí, que si se da algún caso más parecido al de alguno de los ocho enfermos ingresados, no duden en avisarme rápidamente... cuanto antes se detecte la "enfermedad" mejor. Esta tarde estuve hablando con Minerva y, si el lunes no ha mejorado la situación, dice que habrá que evacuar Hogwarts

*crack* le di un mordisco a mi paleta y gemí de dolor por mis dientecitos, pero mas ante la sorpresa de la respuesta¿Evacuar Hogwarts? ¿A dónde? o.o
No pude preguntar mas, con unos suaves golpecitos en la espalda, Madame Pomfrey me hechó fuera.

Asi que con estas estamos, si nadie hace nada pronto, quien sabe a dónde iremos a parar.
Se despide comiendo una paleta de cereza.
Anne Gaultier.


"Obrero del Rock and Roll,
con salario de mendigo pero orgullo de trovador..."
Faltan dos días....